Salsa
para la cabra asada.
Pimienta, finas hierbas, ruda, cebolla, miel, garum,
vino de pasas y un poco de aceite; cuando hierva, añádele
fécula.
Otra
salsa para la cabra.
Pimienta, finas hierbas, perejil, un poco de orégano,
ruda, garum, miel, vino de pasas y un poco
de aceite. Ligar con fécula.
Salsa
caliente para el cordero salvaje.
Pimienta, aligustre, cominos, menta seca, tomillo y laser;
se empapa con vino y se añaden ciruelas damascenas maceradas,
miel, vino, garum, vinagre, vino de pasas
para que dé color y aceite. Se remueve con un manojo de orégano
y menta seca.
Salsa
para toda clase de caza cocida y asada.
Unos granos (unos 10) de pimienta, ruda, aligustre, semilla
de apio, enebro, tomillo, seis gramos de menta seca y tres de poleo. Reducir
todo esto a un polvo finísimo y amalgamarlo machacando. Añadir
a la salsa miel en cantidad suficiente y usar este preparado con garum
mezclado con vinagre.
Salsa
fría para el cordero salvaje.
Pimienta, aligustre, tomi llo, cominos tostados, piñones
tostados, miel, vinagre,
garum
y aceite. Espolvorear con pimienta.
Apicio.
La Cocina en la Antigua Roma.
(Introducción, traducción
y comentarios por Primitiva Flores Santamaría y Esperanza Torrego
Salcedo)
Madrid, E.G.Anaya, 1985